(FNM)
Cuento breve para leer y disfrutar durante el fin de semana.
Un
crimp según la jerga marinera inglesa, es quien antiguamente reclutaba mediante
engaños a los marineros y lucraba vendiéndolos a capitanes de barcos, quienes
los necesitaban para completar las
dotaciones. En el siglo XIX para navegar un velero, era necesario un buen
número de manos hábiles para largar o recoger el paño. En la Buenos Aires de la
época como en la Lima peruana a este tipo de comerciantes humanos se los
llamaba Patrón de Pensiones.